Las vasijas de hierro fundido se han utilizado para cocinar durante cientos de años. Yo siempre me acuerdo de la cocina de mi abuela materna en Asturias; de como era un arte cocinar y hacer todos los preparativos antes de ponerse manos a guisar. Esos momentos era donde la familia se reunía para hablar y alrededor de la comida, de la chimenea, se juntaban palabras con sabores y aromas de cocina. En fin…..
Cuando la olla de hierro fundido es perfecta la distribución del calor es perfecta de tal manera que los alimentos se cocinan de forma pareja pudiendo disfrutar de potencia, aromas, sabores y texturas de la receta a elaborar.
La cocción en piezas de hierro preserva las virtudes de los alimentos, todos los nutrientes y el verdadero sabor en las comidas. Si a eso le sumas el diseño logramos mejorar la presentación de los platos que tanto nos gusta subir en redes dando identidad y estilo a tu cocina.
El consumo de gas y electricidad es mínimo (cocinar con leña con hierro fundido es lo máximo), ya que la transmisión calorífica del hierro no precisa más que una llama pequeña para poder cocinar con las cualidades de un horno. Y Por último, a mi me gusta personalmente la marca LAFONT resistente a todo tipo de elementos de limpieza por su doble proceso de porcelanizado interior. Menos tiempo, menos agua. En fin…